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LAS HAMBRUNAS PROPICIAN CAMBIOS DE COMPORTAMIENTO EN LAS AVES

Los buitres del País Vasco comen en vertederos de basuras

Buitres leonados concentrados en el interior del vertedero de residuos sólidos urbanos de Apario, en el término municipal de Igorre (Vizcaya).
Buitres leonados concentrados en el interior del vertedero de residuos sólidos urbanos de Apario, en el término municipal de Igorre (Vizcaya).
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:53h
Los ataques de buitres al ganado se han explicado como consecuencia de las hambrunas derivadas de la retirada de ganado muerto, en cumplimiento de la legislación para eliminar las llamadas Encefalopatías Espongiformes Transmisibles. Otra sería el uso que estas aves hacen de los basureros para alimentarse, como se ha observado en el País Vasco.

Texto y fotos: Juan Manuel Pérez de Ana
Los buitres de Sierra Salvada sufren la recogida de ganado muerto” fue el título del artículo que publiqué en Quercus 261 (págs. 30 a 32) allá por noviembre de 2007. Podríamos decir que esta nueva entrega es su continuación. Entonces ya hablamos de dos consecuencias para las poblaciones de buitre leonado ante la escasez de carroña desencadenada por la recogida del ganado muerto: menos éxito reproductor y más ataques al ganado.

Siguiendo estudios precedentes (1), hemos determinado el éxito reproductor del buitre leonado en Sierra Salvada (País Vasco) en los años 2001, 2006, 2007, 2008, 2009, 2010 y 2011. Para ello, se han anotado los nidos en los que observamos aves incubando en los censos realizados entre el 15 de febrero y el 15 de marzo de cada año. Posteriormente, también anotábamos los nidos en los que observamos pollo (éxito reproductor) o nada (fracaso reproductor) en los censos del 15 de mayo en adelante.

En el Cuadro 1 se muestra la evolución del éxito reproductor de la población nidificante de buitre leonado en Sierra Salvada. Esta zona se localiza en el extremo occidental del País Vasco y cuenta con una importante presencia de la especie. Aunque ya estaba prohibido antes del brote epidémico de la Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB), buena parte del ganado muerto acababa como alimento de la fauna carroñera. Para evitar la expansión de la enfermedad, conocida como “el mal de las vacas locas”, y su variante humana (enfermedad de Creutzfeld-Jakob) entraron en vigor tres reales decretos en los años 2000 y 2001.

Desde entonces, los cadáveres del ganado comenzaron a ser considerados Materiales Específicos de Riesgo (MER) y, según dichas disposiciones legislativas, debían ser eliminados mediante incineración o inhumación. Como adelantábamos en Quercus 261, el cumplimiento de la legislación para eliminar las Encefalopatías Espongiformes Transmisibles (EET) de entre la cabaña ganadera afectaría a la conservación del buitre leonado y otras especies carroñeras incluidas en los diferentes catálogos de especies amenazadas. Desde entonces, hemos obtenido más información sobre este asunto.

PIE DE FOTO:
Buitres leonados concentrados en el interior del vertedero de residuos sólidos urbanos de Apario, en el término municipal de Igorre (Vizcaya).

RECUADRITO:
Hemeroteca
Quercus 261 (noviembre 2007)
Ref. 5301261 / 3’90
• Los buitres de Sierra Salvada sufren la recogida de ganado muerto. Juan Manuel Pérez de Ana.
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