Desde 2016 han muerto atropellados 18 lobos en tres carreteras de las vertientes madrileña y segoviana de la sierra de Guadarrama, según un reciente estudio de Circinaria. Para esta asociación conservacionista, los atropellos, junto con la caza furtiva, están impidiendo la consolidación y expansión de la especie en el Sistema Central.
Por Raúl Ablanque, Jesús Anero, Ricardo Cubo y María del Carmen Toribio
En la última década se han establecido varios grupos de lobo ibérico (Canis lupus) en el entorno de la sierra de Guadarrama, en zonas que son atravesadas por las carreteras A-1 (Autovía del Norte) y N-110, cuya titularidad corresponde al Ministerio de Fomento, y la M-608, responsabilidad de la Comunidad de Madrid.
Las tres carreteras acaparan los atropellos de lobo de este sector del Sistema Central desde 2016, según un informe recientemente elaborado por la asociación conservacionista Circinaria.
Autores: Raúl Ablanque, Jesús Anero, Ricardo Cubo y María del Carmen Toribio son miembros de la asociación conservacionista Circinaria (info@circinaria.com ).
Agradecimientos: a Julio Dopacio, Clara Flores, Javier Ramón González, Cristina Sanz y Mayte Samblás.
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