Observatorio

Noticiario Enero - 2013

Miércoles 22 de octubre de 2014
Parnasillo
¡Cómo el corazón se goza
recordando las escarchas
y aguaceros con que enero
el ancho suelo inundaba!
Aquellos hielos y lluvias
son las selvas erizadas
que hoy veis de doradas mieses,
y un Dios bueno nos regala.

Juan Meléndez Valdés (1754-1817)
Los Segadores (fragmento)


Almanaque
Enero
1 Salida del Sol: 7’38 h. Puesta de Sol: 16’59 h.

5 Cuarto menguante. Mareas muertas.

11 Luna nueva. Mareas vivas. Sale: 6’58 h. Se pone: 17’10 h.

15 Salida del Sol: 7’36 h. Puesta de Sol: 17’13 h.

18 Cuarto creciente. Mareas muertas.

27 Luna llena. Mareas vivas. Sale: 18’08 h. Se pone: 7’13 h.

31 Salida del Sol: 7’25 h. Puesta de Sol: 17’32 h.

Las horas están expresadas en Tiempo Universal. Para calcular la hora oficial en la Península y Baleares, deben sumarse dos horas durante el horario de primavera-verano y una durante el horario de otoño-invierno. Para Canarias, una hora menos (en otoño coincide con el Tiempo Universal).

Citas de un raro pez pipa
en aguas de Murcia
Los caballitos de mar y los peces pipa forman un grupo dentro de la familia de los signátidos (Syngnathidae). Aunque son habitantes típicos de los mares tropicales, subtropicales y templados, algunas especies pueden encontrarse en aguas salobres e incluso dulces. En todo el mundo se han descrito más de 300 especies repartidas en 55 géneros, si bien en nuestras aguas habitan 13 especies de 3 géneros. Algunas son muy raras a escala global, como el serpentón (Nerophis maculatus), que sólo se encuentra en algunos puntos del Mediterráneo occidental y del mar Adriático. Apenas disponemos de información sobre esta especie en las costas de Murcia y es posible que nunca haya sido citada.

Buzón del Observatorio

Más nidos antiguos
de quebrantahuesos
He leído con interés el excitante relato de José Manuel Amarillo (Quercus 321, pág. 52) sobre la búsqueda de dos nidos de quebrantahuesos (Gypaetus barbatus) descritos por Willoughby Verner en la sierra de Grazalema (Cádiz) a finales del siglo XIX. El tono detectivesco añade emoción a un hallazgo que también tiene trascendencia científica y conservacionista. Aunque hoy estemos imbuidos por la tiranía de lo inmediato e ignoremos a menudo las aportaciones de los naturalistas pioneros, lo cierto es que necesitamos recurrir a ellos si queremos conocer, por ejemplo, los procesos históricos que explican la distribución actual de las poblaciones, o los umbrales de tolerancia de las especies frente a las actividades humanas.

Amapolas de color chichiribaile
En abril del año pasado, Ramón Gómez publicó un interesante artículo en el Observatorio (Quercus 314, págs. 54-55) sobre la amapola (Papaver rhoeas). Como bien dice, sus flores tienen cuatro pétalos, normalmente de color rojo, con una mancha basal purpúreo-negruzca. No obstante, en ocasiones la flor es de color rosa, violeta o más raramente blanca. De hecho, existen numerosas variedades de cultivo de diferentes tonalidades, algunas con flor doble.



Noticias relacionadas