Especies

Mariposas de montaña: serán de las más afectadas por el cambio climático

Primer plano de "Erebia palarica", una mariposa endémica del noroeste de España (foto: Enrique García-Barros).
Miércoles 22 de marzo de 2023
El cambio climático está afectando a muchas especies, tanto animales como vegetales, y las mariposas de montaña van a ser unas de las que más lo sufrirán. Un reciente estudio aporta modelos de distribución potencial que muestran cuáles son las áreas favorables para estos lepidópteros en función de las diferentes condiciones climáticas.

Por el Museo Nacional de Ciencias Naturales

Las mariposas de montaña serán uno de los grupos animales más afectados por el cambio climático. A esta conclusión han llegado investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN) en un estudio con mariposas del género Erebia. Para comprobar cómo afectará el cambio climático a estas mariposas, los investigadores realizaron modelos de distribución potencial que muestran las áreas favorables para las especies según diferentes condiciones climáticas.

La investigadora de la UAM, Helena Romo, afirma: "Los modelos buscan zonas que en el futuro compartan las condiciones climáticas en las que actualmente se encuentran las especies, teniendo en cuenta diferentes predicciones de temperatura y precipitación en los años venideros”. "Hemos considerado dos escenarios, uno más drástico, en el que se prevé un aumento de la temperatura de 3,7 °C para el año 2100, y otro más optimista, en el que el aumento de temperatura previsto es de 1,8 °C", agrega la científica.

Erebia, un género típico de montaña
El género Erebia comprende 19 especies distribuidas en áreas montañosas de la Península Ibérica: Pirineos, Sistema Cantábrico, Sistema Central, Sistema ibérico y Sierra Nevada. Siete de ellas son especies endémicas, es decir que sólo se encuentran de modo natural en estos ámbitos geográficos. Los resultados, publicados en Insect Conservation and Diversity, muestran una dramática reducción del número de áreas climáticamente favorables para las 19 especies. De hecho, 16 de ellas llegarían a desaparecer por completo de nuestro territorio en el escenario más drástico en el periodo 2061-2080.

La "buena noticia" es que de las tres especies que presentan algún área climáticamente favorable en el futuro, dos son endemismos (Erebia palarica y Erebia hispania). Pero la realidad es que, incluso en un escenario menos drástico, las previsiones son que al menos ocho especies no encontrarán áreas donde sobrevivir en el período de años comprendidos entre 2041-2060. Rob Wilson, investigador del MNCN, explica: "Incluso para una de las especies más comunes y de distribución más amplia en la península ibérica, Erebia triarius, se predice una disminución importante de su área favorable en el futuro. Otras especies con una distribución más restringida no presentan ninguna zona favorable para esos escenarios".

Debido a que la mayoría de las especies del género Erebia se distribuyen por los Pirineos o la Cordillera Cantábrica, la mayoría de sus poblaciones conocidas se encuentran dentro de la red existente de espacios protegidos. "Sin embargo, sería interesante incluir nuevas áreas en los lugares donde se predicen condiciones favorables para estas especies en un futuro, de manera que puedan ofrecer mayor protección a las más amenazadas por el cambio climático", apunta Wilson.

Las endémicas podrían ser especies "paraguas"
En suma, los modelos predicen que las 19 especies de mariposas ibéricas del género Erebia son extremadamente vulnerables al cambio climático, siendo mayores los declives previstos para el periodo 2061-2080. De hecho, algunas especies ya ocupan las zonas más elevadas del área de estudio y se espera que pierdan su hábitat independientemente del año o escenario considerados. De acuerdo con los autores, los endemismos de este género podrían actuar como especies "paraguas" para el diseño de nuevos espacios en la red española de áreas protegidas u otras medidas de conservación.

"Las medidas que podrían aplicarse para estas especies prioritarias incluirían un seguimiento de las poblaciones o especies más amenazadas y del estado de sus principales hábitats; el mantenimiento de una amplia variedad de microclimas a través de una estrategia de restauración ecológica en diferentes altitudes para que las especies puedan adaptarse a las condiciones impuestas por el cambio climático y, por supuesto, conseguir a nivel global una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero", concluye Romo.

Artículo de referencia:
Helena Romo y otros autores (2023). Modelling the scope to conserve an endemic-rich mountain butterfly taxon in a changing climate. Insect Conservation and Diversity.


Noticias relacionadas