El ingreso en un centro de recuperación de un animal herido puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. El caso del águila real Velita nos muestra además que la dedicación e innovación en este tipo de centros es vital para que la fauna tratada pueda ser devuelta a la naturaleza en buenas condiciones.
Por Antonio Pinilla y Álvaro Guerrero
El águila real Velita fue bautizada con este nombre en honor a la sierra donde fue encontrada gravemente herida, en una de las áreas más importantes en España para la concentración invernal de grandes rapaces: la cuenca del río Matachel, en el sureste de Badajoz.
Mucho se ha oído hablar en los últimos tiempos de este lugar, por ser la zona de liberación de los primeros linces ibéricos que se han reintroducido en Extremadura.
Posiblemente víctima de una colisión con un tendido eléctrico, Velita entró en febrero de 2013 en el centro de recuperación de fauna silvestre que Amus tiene en Villafranca de los Barros (Badajoz), con una fractura abierta e infectada en una de sus alas. Verificamos genéticamente que era un macho y se estimó su edad en cuatro años.
Autores: Antonio Pinilla y Álvaro Guerrero son fundadores de Amus y dirigen el centro de recuperación de fauna de esta asociación en Villafranca de los Barros (Badajoz). Contacto: Amus, tel. 924 12 40 51,
info@amus.org.es Este contenido es un resumen / anticipo de una información cuyo texto completo se publica en la revista Quercus, tanto en su versión impresa como digital.
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