En 2025 se cumplen veinte años de la primera pareja de águila pescadora que se formó en Andalucía, gracias a un proyecto de reintroducción desarrollado entre 2003 y 2012. El año pasado fueron casi veinte las parejas que criaron en esta región, un dato que confirma el éxito del proyecto, al mismo tiempo que refleja que esta población se ha estancado, un factor que es actualmente objeto de estudio.
Por Carlos Torralvo, Jorge García-Macía, José Manuel Sayago, Alberto Sanabria, Virginia Morandini y Miguel Ferrer
Las 23 águilas pescadoras (Pandion haliaetus) nacidas en 2024, de las 19 parejas que llegaron a criar, evidencian el éxito de conservación que supone el proyecto de reintroducción del águila pescadora en Andalucía, desarrollado por iniciativa de la Junta de Andalucía, bajo la dirección científica de la Estación Biológica de Doñana y la coordinación técnica de la Fundación Migres. Este proyecto supuso la liberación de 191 aves procedentes de Alemania, Escocia y Finlandia durante un periodo de diez años.
La actual población reproductora andaluza de águila pescadora se ha establecido en aquellos lugares que fueron seleccionados en un inicio por el proyecto de reintroducción, casi todos ellos con algún tipo de protección normativa en la actualidad.
Por un lado, se encuentra la subpoblación del Parque Natural de Los Alcornocales, en la provincia de Cádiz, distribuida en dos embalses. Estos espacios artificiales son óptimos tanto por la abundancia de presas, como la carpa común (Ciprinus caripio) y la perca americana (Micropterus salmoides), como por la baja densidad de población humana en la zona, que reduce las posibles perturbaciones, así como por la presencia de lugares potenciales de nidificación, que consisten principalmente en apoyos de líneas eléctricas. Estos apoyos corresponden a líneas de distribución, que se abandonaron cuando se construyeron los embalses, y a líneas de transporte de Red Eléctrica de España. En ambos casos, se instalaron plataformas de nidificación destinadas a la especie.
AUTORES:
Carlos Alberto Torralvo Moreno es técnico en la Fundación Migres y lleva los treinta años de su vida profesional dedicado al seguimiento y conservación de la fauna, en especial del águila pescadora y otras aves rapaces amenazadas.
Jorge García Macía es doctor en Zoología por la Universidad de Alicante y actualmente desarrolla en la Fundación Migres varias líneas de investigación, entre ellas las dinámicas poblacionales del águila pescadora y las afecciones antrópicas que sufre esta especie.
José Manuel Sayago Díez es empleado público de la Junta de Andalucía. Lleva más de treinta años dedicado a la conservación del águila pescadora en Andalucía, participando también en el seguimiento y conservación de aves acuáticas y esteparias.
Alberto Sanabria Fernández es biólogo y funcionario de la Junta de Andalucía. Actualmente es el responsable de la conservación en Andalucía tanto del águila pescadora como de otras aves acuáticas amenazadas y del aguilucho cenizo.
Virginia Morandini Clapés-Sagañoles es doctora en Biología Integrativa por la Universidad de Sevilla y la Estación Biológica de Doñana. Vicepresidenta de la Fundación Migres, ha centrado sus investigaciones en especies indicativas de la salud de los ecosistemas.
Miguel Ferrer Baena es profesor de Investigación del CSIC y trabaja en la Estación Biológica de Doñana, de la que fue director desde 1996 hasta 2000. Es presidente de la Fundación Migres desde 2003.
Dirección de contacto:
Carlos Torralvo
ctorralvo@fundacionmigres.org
Más información:
Amigos del Águila Pescadora
www.facebook.com/amigospescadora
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