El aislamiento como motor de la evolución
Caracoles terrestres de las islas Chafarinas
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:53h
Texto y fotos: Arturo Valledor de Lozoya
Basta una breve visita a las islas Chafarinas para percatarse de lo abundantes que son allí los caracoles terrestres. En algunos lugares, sus conchas llegan a tapizar prácticamente el suelo y es imposible deambular sin pisarlas. Además, este pequeño archipiélago está contiguo al norte de África, una de las zonas del planeta con mayor diversidad de gasterópodos terrestres.
El interés de estudiar la fauna de caracoles terrestres en una reserva natural, como las islas Chafarinas, estriba en que son buenos indicadores de la biodiversidad local y su estado de conservación. Debido a la escasa movilidad de estos animales, no pueden huir a otras regiones si su hábitat se ve alterado por incendios, deforestación, urbanizaciones o especies invasoras, de modo que sus poblaciones desaparecen precozmente en tales circunstancias. De hecho, junto con los bivalvos de agua dulce, son el grupo zoológico más afectado por la pérdida de biodiversidad achacable a las actividades humanas, especialmente en el caso de especies insulares o ligadas a hábitats forestales. También tiene interés conocer la importancia de los caracoles en el ecosistema de las islas y detectar taxones que hayan podido diferenciarse por aislamiento.