La asociación Brinzal, dedicada al estudio y la conservación de las rapaces nocturnas, ha llevado a cabo en el año 2018 un exhaustivo censo de la población de lechuza común (Tyto alba) que hay en la Comunidad de Madrid, con resultados poco esperanzadores.
Los datos nos dicen que tan sólo quedan de 25 a 37 parejas reproductoras en toda la región. Se trata de una cifra bastante alarmante teniendo en cuenta las densidades que alcanzaba la especie hasta hace pocos años.
En un periodo de menos de veinte años, esta rapaz nocturna ha pasado de ser abundante y estar homogéneamente repartida en territorio madrileño a contar con un número alarmantemente bajo de parejas, acantonadas en zonas muy localizadas de la Comunidad de Madrid.
Autor: Alberto Foruny (albertoforuny@brinzal.org ), biólogo, es responsable de comunicación de Brinzal.
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